Como en un teatro que se van apagando las luces y baja el telón así es la vida de los peloteros. Cuando el candil deja de brillar es hora de decirle adios al gran escenario de los diamantes y en este instante ese luce ser la situación para Iván Rodríguez.
El boricua mejor conocido como “Pudge” en el mundo béisbolero anda trabajando de forma tenaz en la ciudad de Miami donde una vez brilló con los Marlins pero a poco tiempo de comenzar la campaña 2012 parece que su oportunidad de ver acción un verano más en las mayores son diminutas.
Para el borincano lucia como un destello como su probablemente última oportunidad el jugar con los Reales de Kansas City pero con el canje de este conjunto con los Astros de Houston por los servicios de Humberto Quintero parece ser que sus 21 temporadas están llegando a su fín.
No hay discusión que todo atleta quisiera jugar por toda su carrera pero en el caso de Iván mucho se viene hablando desde hace tiempo que sus números no son los mismos y que están en declive. Fué en el 2009 una magnífica actuación que tuvo con el equipo de Puerto Rico en ese Clásico Mundial de Béisbol que le revivió su carrera con un contrato con los Astros de Houston pero sus números no estuvieron ahí y terminó esa campaña con los Rangers de Texas.
Para el 2010 muchos se sorprendieron cuando los Nacionales de Washington lo firmaron como agente libre con un contrato de 2 años por $ 6 millones. En aquel momento, el Dirigente Jim Riggleman aceptó que estamparon a Iván para fortalecer la posición de receptoria y fuera un tutor para el joven Jesús Flores.
En verdad su estadia en la ciudad capital no fué su mejor trance y tal como se anda escuchando parece ser que su último sueño de lograr 3,000 hits en su carrera no va ser realidad.
Es obvio que el hombre de 40 años de edad quiera continuar en sus deseos pero bajo ninguna circumstancia debe pensar en ningún momento que se va en vano. Ya sea que juegue o no en el 2012, su próximo paso es su entrada al Salón de la Fama en Cooperstown.
Su resumé de terminar su carrera es del receptor con más juegos participados en la historia de y otras 12 marcas para su posición defensiva en la historia de las Grandes Ligas. Fué un 14 veces Todo-Estrella; 13 veces Guante de Oro y siete veces Bate de Plata. En 1999 fué el Jugador Más Valioso de la Liga Americana y en el 2003 el Jugador Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional como una de las piezas claves de los evemtuales campeones mundiales de ese año de la franquicia de los Marlins. Entre puertorriqueños es el líder actual en turnos al bate y dobletes conectados y y se quedó a 156 indiscutibles de al menos empatar en los 3,000 con el gran Roberto Clemente.
Puede que el tiempo de una sorpresa y lo veamos brillar una vez más pero sí llegó su momento hay que bien decir y lo dijo hasta el propio Johnny Bench que Iván Rodríguez es el mejor en haber jugado la receptoria en la historia de las Mayores.
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