Puerto Rico y República Dominicana puede que no sean de un pájaro las dos alas pero tal como lo han descrito tantos comunicadores béisboleros en estos dias en una sola palabra tanto boricuas como quisqueyanos han jugado este Clásico Mundial del 2013 con pura emoción.
Desde arrancada Dominicana era y es uno de los favoritos a ganar el torneo pero en el caso de Puerto Rico apego y amor patrío era y es una de sus llaves para llegar hasta la gran final en el AT&T de San Francisco.
En Miami en el Marlins Park ambas novenas chocarán para determinar quienes se enfrentarán a Holanda y al reinante defensor Japón pero para cada corazón con sangre latinoamericana este partido significa la preparación a la travesía de que sea el monarca del deporte del guante y el bate de América.
Esta semana el mundo catolico eligió al primer Papa latinoamericano en el argentino hoy Papa Francisco y seria de muy bien de Nuestra Señora de la Altagracia y Madre de la Divina Providencia darle su bendición a las tropas de los manda más Edwin Rodríguez y Tony Peña.
Para esos sueños sean realidad sín ayuda divina Dominicana tiene que mantener su ritmo ofensivo de sus bates calientes entre otros Robinson Canó, Nelson Cruz, Hanley Ramírez y José Reyes. Claro está su pitcheo debe continuar encomiable. Como dijo su propio dirigente Tony Peña"aquí un juego significa mucho, estas series cortas son muy difíciles".
Para Dominicana esta es su segunda ocasión que llegan hasta la serie final. En el 2006 en el Petco Park en San Diego la quimera de campeonato desapareció con la novena de Cuba.
Por otro lado, los de la Isla del Encanto en su primera travesia a una ronda de finales en su historia puede que no lo demuestren sus números colectivos en papel pero esos indisctuibles en momentos ciertos serán clave y de suma importancia en especial de sus maderos ardientes entre otros de Mike Aviles, Yadier Molina, Angél Págan y Luis “Wicho” Figueroa. Similar su cuadro de lanzadores que clásico tras clásico ha sido subestimado y en conjunto han demostrado sín grandes nombres algunos que la pasión ha estado ahí de ganar.
La filosofia de Edwin Rodríguez ha sido “un juego a la vez” y bien sabe que llegar lejos es una misión "hemos jugado sabiendo lo que representa una buena actuación de Puerto Rico aquí". "Es poner a Puerto Rico de nuevo en el mapa del béisbol".
Tres siglos atrás un frances escribió “el honor consiste en hacer hermoso aquello que uno está obligado a realizar”. El tiempo nos dirá sí lo podrá realizar Puerto Rico y República Dominicana.
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